La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha presentado los “Principios Globales para la Integridad de la Información”, con el objetivo de combatir la desinformación, la información errónea y los discursos de odio en la era digital. Estos principios se articulan en cinco ejes fundamentales destinados a enfrentar los desafíos que surgen con la evolución tecnológica y el uso de la inteligencia artificial en la difusión de información.
El primer principio, denominado confianza y resiliencia de la sociedad, establece la necesidad de fortalecer la confianza del público en diversas fuentes de información y proteger a los activistas, periodistas, trabajadores humanitarios y personal de la ONU contra la censura y la intimidación en plataformas digitales.
El segundo principio se refiere a los incentivos saludables. La ONU propone una reestructuración de los modelos de negocio de publicidad y monetización para que se alineen con los derechos humanos, promoviendo un entorno de incentivos que no comprometa la integridad de la información.
El tercer principio, empoderamiento público, se centra en capacitar a la población para que pueda acceder a una gama diversa de información y evaluar la credibilidad de las fuentes. Este principio subraya la importancia de la alfabetización digital como herramienta para combatir la desinformación.
El cuarto principio es la existencia de medios de comunicación independientes, libres y pluralistas. Este eje destaca la necesidad de proteger la libertad de prensa como un componente esencial del estado de derecho y la democracia, y aborda cómo la dependencia de los ingresos publicitarios puede afectar la calidad y veracidad de la información difundida.
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El quinto principio, transparencia e investigación, promueve una comprensión exhaustiva de las nuevas tecnologías y su impacto en la difusión de información y la protección de datos personales. Este principio aboga por la implementación de regulaciones que aseguren una difusión responsable y ética de la información.
El Secretario General de la ONU, António Guterres, subrayó la importancia de la libertad de expresión y el acceso a una diversidad de opiniones e instó a las grandes empresas tecnológicas a asumir su responsabilidad en mitigar los daños potenciales causados por sus productos.
El documento de la ONU incluye recomendaciones específicas para los estados miembros, tales como la protección de los derechos humanos y de las poblaciones, la garantía de la libertad de prensa y la transparencia, y el fortalecimiento de la solidaridad global. Además, la ONU insta a encontrar soluciones multilaterales que serán discutidas en la próxima Cumbre del Futuro, programada para septiembre, donde se espera que los líderes mundiales adopten los principios propuestos.
“Las amenazas a la integridad de la información no son nuevas, pero están proliferando y expandiéndose a una velocidad sin precedentes en las plataformas digitales, potenciadas por las tecnologías de inteligencia artificial. La ciencia, los hechos, los derechos humanos, la salud pública y la acción climática están bajo ataque. Y cuando se ataca la integridad de la información, también se ataca la democracia, que depende de una percepción compartida de la realidad basada en hechos. Las narrativas falsas, las distorsiones y las mentiras generan cinismo, incredulidad y falta de compromiso. Socavan la cohesión social y ponen aún más fuera de alcance los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, señaló el Secretario General en una alocución.