La jueza de distrito de Florida (Estados Unidos), Aileen Cannon, ha decidido posponer indefinidamente el inicio de un juicio penal contra el expresidente Donald Trump. La medida se fundamenta en la necesidad de abordar una serie de mociones previas al juicio y cuestiones relacionadas con la Ley de Procedimientos de Información Clasificada (CIPA).
El aplazamiento implica la anulación de la fecha originalmente establecida para el juicio, programada para el 20 de mayo. En su lugar, se han fijado nuevos plazos para gestionar antecedentes pendientes y resolver las mociones solicitadas. La fecha límite final para estas diligencias se ha fijado para el 22 de julio de 2024.
El caso en cuestión versa sobre acusaciones de resguardo ilegal de documentos clasificados de seguridad nacional por parte del expresidente Trump, tras su salida de la Casa Blanca. La jueza Cannon ha argumentado que los intereses de la justicia justifican esta prórroga, priorizando el adecuado tratamiento de los aspectos procesales pertinentes.
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Se ha observado de cerca el calendario judicial debido a la proximidad de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre y la continuidad de otros procesos legales contra Trump. La defensa del expresidente ha solicitado que el juicio se programe en Florida después de las elecciones, aduciendo potenciales interferencias electorales y cuestionamientos por las posibles motivaciones políticas del caso. Por su parte, el fiscal especial ha rechazado estas acusaciones, destacando la necesidad de evitar la dilación procesal.
Trump enfrenta un total de 88 cargos penales en cuatro casos separados, habiendo presentado declaraciones de inocencia en todos ellos. Además del caso en Florida, está siendo procesado por cargos relacionados con falsificación de registros comerciales en Manhattan, interferencia electoral en Georgia e intentos de revertir su derrota electoral de 2020 en un tribunal federal en Washington, DC. Este último caso se encuentra en espera de una decisión de la Corte Suprema sobre reclamaciones de inmunidad absoluta.
El aplazamiento del juicio en Florida reduce la posibilidad de que se lleve a cabo antes de las elecciones presidenciales. Se ha programado una audiencia sellada sobre asuntos del gran jurado para el 8 de mayo, lo que indica la continuación de la actividad procesal en este caso.
“Finalizar una fecha de juicio en esta coyuntura, sería imprudente e inconsistente con el deber de la Corte de considerar completa y justamente las diversas mociones previas al juicio pendientes. Ante el Tribunal, existen cuestiones críticas de la CIPA y preparativos adicionales previos al juicio, según sea necesario para presentar este caso ante un jurado”, señaló la magistrada.