El Presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, promulgó el Decreto No. 422, que establece la facultad del Estado ruso para confiscar activos estadounidenses como medida compensatoria por la posible incautación de activos rusos en Estados Unidos. Este decreto responde a la entrada en vigor de la Ley de Reconstrucción de Oportunidades y Prosperidad Económica para los Ucranianos en Estados Unidos, la cual autoriza al presidente estadounidense a confiscar, transferir y otorgar activos soberanos rusos en territorio estadounidense.
Conforme al Decreto, tanto el gobierno ruso como el Banco Central de Rusia pueden solicitar a un tribunal del país la evaluación de la legalidad de la confiscación de sus activos en Estados Unidos. Si el tribunal determina que dichos activos fueron injustamente confiscados, puede ordenar la transferencia a título de compensación de los activos o propiedades estadounidenses ubicadas en Rusia.
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La normativa identifica varios tipos de activos susceptibles de embargo, incluyendo:
1- Valores estadounidenses.
2- Participaciones en empresas rusas.
3- Bienes inmuebles y muebles.
4- Derechos de propiedad.
Asimismo, se menciona la posibilidad de embargar activos de individuos controlados por entidades estadounidenses, aunque no se especifican los criterios para determinar dicho control. Actualmente, los activos de inversionistas extranjeros, incluyendo individuos y fondos de inversión estadounidenses, se encuentran retenidos en cuentas especiales “tipo C”, creadas en febrero de 2022 tras la imposición de sanciones occidentales.
La promulgación del Decreto No. 422 coincidió con la reunión de los ministros de finanzas del G7 en Stresa, Italia, donde se discutieron las posibles aplicaciones para los 300.000 millones de dólares en activos rusos congelados. Estados Unidos ha propuesto utilizar estos fondos para apoyar financieramente el esfuerzo bélico de Ucrania.
En definitiva, el Decreto establece un marco legal para la confiscación de activos estadounidenses en Rusia como respuesta a acciones equivalentes tomadas por Estados Unidos. Este acto jurídico refleja una estrategia de compensación recíproca y define los procedimientos y tipos de activos que pueden ser sujetos a embargo bajo la jurisdicción rusa.