La Audiencia Provincial de Burgos (España) resolvió no aplicar la agravante de homofobia a un condenado por las agresiones a un hombre homosexual.
Revocó la sentencia apelada por la defensa y estimó que no procede aplicar la agravante de homofobia por lo que rebajó la pena por el delito de lesiones de dos años de prisión a nueve meses, al considerar que utilizar el grito de «maricón» mientras se ataca a otro hombre no es suficiente para calificar el ataque como homófobo.
Para la aplicación de esta circunstancia agravante, se debe probar la intencionalidad; requiere la evidencia de que el hecho delictivo obedece a razones contrarias a los principios de igualdad, dignidad personal y tolerancia que exige la convivencia social; se debe probar cuál fue la intención del autor, que supone a su vez probar el conocimiento de que la víctima era homosexual, y la voluntad de llevar a cabo la acción por razones homófobas, lo que en el caso, el tribunal de segundo grado descarta.
Aunque pudiera ser cierto que el acusado golpeó en el rostro a la víctima al tiempo que le llamaba «maricón», de ello no puede darse por probado que conociera su condición de homosexual, señala el fallo.
En opinión del tribunal, y dado que la intención «no se puede fotografiar», la agravante exige la prueba plena tanto del hecho y la participación del acusado, como de la condición de la víctima y la intencionalidad del autor, elemento este último de carácter subjetivo relativo al móvil de causar discriminación y agredir por ser la víctima homosexual y conocer tal circunstancia, que es lo que determina la discriminación por razón de condición sexual, conocimiento que, en el caso, no queda probado, razona la sentencia.
Noticia Relacionada
Acusado y víctima no se conocían con anterioridad y aunque pudiera presumirse exteriormente su condición sexual de una forma inequívoca, lo relevante no es tanto probar la condición de la víctima, si era homosexual o no, sino en si el sujeto activo así lo creía cuando cometió la agresión y esa fue la finalidad o razón de su ataque.
Al existir una duda razonable sobre la intencionalidad discriminatoria por razón de sexo en la actuación del acusado, en aplicación del principio «in dubio pro reo», el tribunal acogió el recurso y decidió no aplicar la agravante.
Vea texto de sentencia de Audiencia Provincial de Burgos Sección 1ª, Sentencia 54/2024.