La Corte de Apelaciones de Santiago ordenó al colegio Saint George’s de la comuna de Vitacura cancelar la matrícula para el año 2025 de los alumnos involucrados en la adulteración de imágenes de alumnas de ese centro de educación, mediante el uso de inteligencia artificial.
Cabe señalar que todo se originó cuando alumnos de ese establecimiento alteraron fotografías de algunas de sus compañeras, para superponer sus rostros en cuerpos de mujeres desnudas, utilizando para ello plataformas de edición de imagen mediante inteligencia artificial, técnica conocida como “deepfake”.
Esto devino en la presentación de acciones de protección por parte de los padres y apoderados de las alumnas, quienes acusaron vulneración de garantías de las adolescentes, como el derecho a la honra y la propiedad -en el sentido del mal uso de la imagen-, entre otras.
La Corte de Santiago dictó sentencia y acogió el arbitrio cautelar ordenándole al colegio cancelar la matricula de los alumnos involucrados para el período 2025.
La postura del Colegio frente al fallo.
Conocida la decisión de la Corte capitalina, el pasado 10 de agosto, mediante un comunicado dado a conocer a la comunidad, el establecimiento de la comuna de Vitacura indicó que apelará ante la Corte Suprema.
Sostuvo que “(…) Mantenemos nuestro compromiso con el resguardo y el bienestar de las alumnas afectadas, de los estudiantes involucrados y de toda la comunidad escolar, por lo que continuaremos manejando esta situación con el debido cuidado y la reserva que corresponden…”.
El malestar de los apoderados.
La decisión de apelar el fallo ante el máximo Tribunal no fue bien recibida por un sector de la comunidad del Colegio Saint George’s. Uno de los apoderados, en carta al director de El Mercurio, expresó que la postura adoptada es una determinación unilateral de la rectora del establecimiento, cuestionando el deseo de no querer cancelar la matricula de los involucrados.
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Este apoderado refiere que, “(…) La decisión anunciada de apelar la sentencia de la Corte de Apelaciones que afecta al Saint George’s College no es una decisión del colegio, como declara en su carta a la comunidad la rectora del establecimiento, sino que es una decisión suya y de su equipo asesor”.
De esta forma, la comunidad del colegio del sector oriente de la capital seguirá el desarrollo de la apelación, instancia en que el Colegio buscará una solución que no afecte el derecho a la educación de los involucrados, y a la vez, cautelar las garantías de las alumnas afectadas.