El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, se declaró culpable ante un tribunal federal estadounidense en las Islas Marianas del Norte de un cargo de conspiración para obtener y divulgar información de defensa nacional. De este modo, Assange, de nacionalidad australiana, obtuvo su libertad tras pasar cinco años en una prisión del Reino Unido, país en el que hizo frente a numerosas solicitudes de extradición de Estados Unidos.
Durante los siete años previos, estuvo refugiado en la Embajada de Ecuador en Londres para evitar ser juzgado en Estados Unidos y Suecia. En 2019, el asilo otorgado por Ecuador fue revocado, lo que resultó en su arresto por las autoridades británicas. Se permitió su liberación de la custodia del Reino Unido tras negociar un acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Julian Assange, quien fundó WikiLeaks en 2006, una plataforma dedicada a la publicación de documentos clasificados filtrados, incluyendo cables diplomáticos y material confidencial de defensa, enfrentaba originalmente 18 cargos en Estados Unidos relacionados con la obtención y difusión de filtraciones de información militar y de inteligencia.
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Según la acusación previa, podría haber enfrentado hasta 175 años de prisión si hubiese sido extraditado a Estados Unidos. Sin embargo, la nueva acusación redujo los cargos a uno de conspiración para obtener y divulgar información de defensa nacional. Se alega que Assange colaboró con la ex analista de inteligencia del ejército estadounidense, Chelsea Manning, para publicar documentos clasificados de diversas categorías de seguridad.
Manning fue condenada en 2013 a 35 años de prisión militar por filtrar documentos clasificados a WikiLeaks, incluyendo un video de 2007 que mostraba el ataque de un helicóptero estadounidense contra civiles en Irak. En 2017, el presidente Barack Obama conmutó la sentencia de Manning.
La declaración de culpabilidad de Assange se realizó en las Islas Marianas del Norte debido a su resistencia a presentarse en el territorio continental de Estados Unidos, lo que llevó a las partes a acordar esta ubicación remota en el Océano Pacífico.