El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, promulgó una orden ejecutiva que reconoce el inglés como idioma oficial del país. Al fundar su decisión, hizo referencia al hecho de que la Declaración de Independencia y la Constitución fueron redactadas en dicho idioma.
La orden establece que, en el proceso de integración de nuevos ciudadanos, el aprendizaje y uso del inglés debe contribuir a la participación en la vida comunitaria, el acceso a oportunidades económicas y la incorporación a las tradiciones nacionales. Asimismo, se señala que el dominio del idioma permite una mayor contribución a la sociedad por parte de los inmigrantes naturalizados.
Si bien la orden no establece la prohibición de elaboración oficial de documentos en otros idiomas, se llevó a cabo la eliminación de la sección en español del sitio web Whitehouse.gov (sitio oficial de la Casa Blanca). No obstante, se aclara que las versiones archivadas de dicha sección siguen estando disponibles.
Además, la resolución deroga la Orden Ejecutiva 13166, emitida en el año 2000, la cual obligaba a las agencias federales a evaluar la necesidad de prestar servicios adicionales para personas con dominio limitado del inglés. Como consecuencia, el Fiscal General de Estados Unidos recibió instrucciones para emitir directrices de cumplimiento conforme a la normativa vigente.
Noticia Relacionada
En este contexto, diversas organizaciones han manifestado su rechazo a esta normativa. Entre ellas, el grupo United We Dream expresó preocupación sobre posibles implicaciones en programas educativos para estudiantes inmigrantes y en la oferta de programas lingüísticos en otros idiomas.
De acuerdo con datos del Censo de los Estados Unidos, en un informe publicado en 2022, el número de hogares en los que no se habla inglés aumentó de 23,1 millones en 1980 a 67,8 millones en 2019. El informe también señala la existencia de más de 350 idiomas hablados en el país.
“Desde la fundación de nuestra República, el inglés ha sido utilizado como nuestro idioma nacional. Los documentos históricos de gobierno de nuestra nación, incluida la Declaración de Independencia y la Constitución, han sido escritos en inglés. Por lo tanto, ya es hora de que el inglés sea declarado idioma oficial de los Estados Unidos. Un idioma designado a nivel nacional es el núcleo de una sociedad unificada y cohesionada, y los Estados Unidos se fortalecen con una ciudadanía que puede intercambiar ideas libremente en un idioma compartido”, señala la normativa.
“Al dar la bienvenida a los nuevos estadounidenses, una política de fomento del aprendizaje y la adopción de nuestro idioma nacional hará de los Estados Unidos un hogar compartido y permitirá a los nuevos ciudadanos alcanzar el sueño americano. Hablar inglés no sólo abre puertas económicas, sino que ayuda a los recién llegados a participar en sus comunidades, participar en las tradiciones nacionales y retribuir a nuestra sociedad. Esta orden reconoce y celebra la larga tradición de ciudadanos estadounidenses multilingües que han aprendido inglés y lo han transmitido a sus hijos para las generaciones futuras”, agrega el texto.