Noticias

En el contexto de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer.

Informe Anual del INDH 2024 destaca la situación de las personas defensoras de derechos humanos en Chile, con enfoque en las mujeres.

El tercer capítulo del Informe Anual del INDH analiza los riesgos y amenazas a los que se enfrentan las personas defensoras de derechos humanos en Chile, especialmente las mujeres, en el contexto del Día Internacional de la Mujer. A pesar de avances como el Acuerdo de Escazú, persisten fallas en la protección y capacitación de quienes defienden los derechos humanos en el país.

9 de marzo de 2025

El tercer capítulo del Informe Anual 2024 del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) aborda la “Situación de las Personas Defensoras de DD.HH.”, un tema de creciente relevancia en el contexto de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo. A lo largo de sus 57 páginas, el informe destaca los riesgos y amenazas a los que se enfrentan quienes defienden los derechos humanos en Chile, con especial énfasis en las mujeres, que son las principales víctimas de hostigamientos y agresiones.

A pesar de los avances en la protección de estas personas, como la promulgación del Acuerdo Regional sobre el Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales (Acuerdo de Escazú), que busca proteger a los defensores de derechos humanos en la región, el informe revela importantes falencias. Entre ellas, la falta de capacitación específica en ninguna institución del país sobre la protección de los defensores y la ausencia de mecanismos eficaces para asesorar y acompañar las denuncias de amenazas o agresiones.

Cifras alarmantes

Según datos recopilados en los últimos cinco años, 71 personas defensoras de derechos humanos han estado en situación de riesgo, y 55 han sido objeto de amenazas. De estas personas, la mayoría (47) son mujeres, lo que pone de manifiesto la violencia específica que enfrentan las defensoras, especialmente aquellas que luchan por los derechos ambientales. Un caso destacado es el de Katta Alonso, dirigenta de Mujeres en Zona de Sacrificio en Resistencia de Quintero y Puchuncaví, quien fue amenazada en 2019. A pesar de presentar su denuncia al INDH y al Ministerio Público, la Fiscalía Local de Quintero no investigó el caso.

El informe también resalta el hostigamiento sufrido por tres defensoras de Modatima en Valparaíso, que han sido amenazadas por su lucha por el acceso al agua. Lorena Donaire, una de ellas, fue víctima de un incendio en su casa en La Ligua en junio de 2022, un hecho que está siendo investigado por el Ministerio Público.

Un panorama preocupante

A nivel regional, la situación de Chile se considera relativamente menos grave en comparación con otros países. Según la organización internacional Front Line Defenders, entre 2018 y 2023, Chile registró nueve muertes de defensores de derechos humanos, un número mucho menor que el de otras naciones de América Latina, que suman miles de víctimas. No obstante, las amenazas y hostigamientos siguen siendo una constante.

Uno de los principales obstáculos que enfrentan los defensores de derechos humanos en Chile es el hostigamiento judicial. El informe menciona las demandas estratégicas contra la participación pública (SLAPP, por sus siglas en inglés), un mecanismo utilizado para silenciar a quienes critican a figuras públicas o defienden derechos en situaciones de riesgo. Un ejemplo de este tipo de demandas es el caso de Baraona Bray versus Chile, que resultó en una condena por injurias graves contra el defensor ambiental, una decisión que fue rechazada por la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Avances normativos y desafíos pendientes

Aunque el informe señala algunos avances, como la aprobación del Protocolo para la Protección de las Personas Defensoras de DD.HH., que fue aprobado en abril de 2024, aún persisten desafíos importantes. El protocolo establece mecanismos de protección, pero la falta de implementación efectiva y de medidas educativas específicas sigue siendo una preocupación central.

El Acuerdo de Escazú, vigente desde 2022, es un paso importante hacia la protección de los defensores de derechos humanos en América Latina, y Chile está comprometido con su implementación. Sin embargo, aún queda trabajo por hacer para garantizar que las personas defensoras de derechos humanos reciban el reconocimiento y la protección que merecen.

En conclusión, el Informe Anual del INDH 2024 subraya la urgencia de fortalecer las políticas públicas y la capacitación de las autoridades para proteger a las personas defensoras de derechos humanos en Chile, especialmente a las mujeres, quienes siguen siendo las más vulnerables frente a la violencia y las amenazas.

Te recomendamos leer:

Agregue su comentario

Agregue su Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *