El manotazo realizado a la CORFO es grotesco, sobre todo cuando se compara con los traspasos extraordinarios de la entidad al por entonces gobierno de Sebastián Piñera. En aquella ocasión, el monto ascendió a un total de un billón de pesos para sortear la crisis del COVID-19, mientras que el gobierno de Gabriel Boric solicitó un total de 3,5 billones de pesos entre 2023 y 2024, sin ninguna crisis catastrófica que afectase nuestro país.
Sumado a lo anterior, el Ministro Grau, en conjunto con los demás ministros de la actual administración, incurrieron en algo cuanto menos cuestionable, pues por meses aseguraron que durante 2023 se habían cumplido las metas fiscales. Sin embargo, esto no fue tal, pues se llegó a dicho resultado inyectando recursos provenientes de la venta de patrimonio de la corporación.
La responsabilidad fiscal debe ser el norte de todo gobierno, pues el dinero que manejan es arrebatado a las personas mediante impuestos cada vez más altos, y lo que menos quiere ver la gente es cómo dicho dinero es despilfarrado, o peor aún, coaptado por políticos a manotazos llenos.
Tomás Ojeda Aravena
Fundación Para el Progreso