Recientemente se dio a conocer el millonario gasto que implica el programa “Gas de Chile” para la Empresa Nacional del Petróleo (Enap), siendo $117 mil el costo por cada cilindro de gas entregados durante el 2022.
De esta manera, se constata una vez más que la ineficiencia de la acción pública y el síndrome populista de nuestra clase política provoca fallas que afectan a los contribuyentes en nombre de mayor justicia social. Y que realmente, no existe algo como un “precio justo” sino que más bien solo existe un precio, en el que cada individuo desde un juicio personal determina el valor que le quiera asignar, siendo ese valor subjetivo.
Seguir pensando que medidas de corte socialista o de planificación central son por definición “buenas”, es hacer caso omiso a los casos que históricamente han demostrado su fracaso.
Sebastián Millán Calisto
Fundación para el Progreso