Normas que regulan cuando dos o mas empresas serán consideras como un solo empleador, se impugnan ante el Tribunal Constitucional.
Las requirentes estiman que los preceptos legales objetados vulneran los derechos de propiedad, a desarrollar cualquier tipo actividad económica, a una protección justa y pacífica del desarrollo de una negociación colectiva y el contenido esencial de esas garantías.