Proyecto de ley tipifica una nueva conducta de acoso para castigar a quienes siguieren, establezcan contacto, llamen a su teléfono o envíen comunicaciones a las víctimas para que no denuncien delitos.
“Quien, en contra de la voluntad de otra persona, afectando con ello gravemente las condiciones de su vida privada, insistentemente la siguiere, intentare establecer contacto con ella o llamare a su teléfono o le enviare comunicaciones”.