Proyecto que modifica el Código Penal para despenalizar el aborto en las primeras 14 semanas de gestación se aprueba en general por la Cámara Baja.
La criminalización no impide que las mujeres aborten ni las disuade de no practicarlo. El único efecto de las leyes punitivas es la clandestinidad y la inseguridad de las mujeres que deciden abortar, además del estigma que se impone sobre ellas.