En la especie, el recurrente eludió un control vehicular y fue perseguido durante 6 kilómetros hasta que se le dio alcance. Una vez detenida la marcha, la policía se percató del olor a marihuana al interior del vehículo.

Es irrelevante el estado de los vidrios de un vehículo al tenor de la facultad otorgada a la policía por la Ley N°18.290 para controlar vehículos. Asimismo, el olor a marihuana es un antecedente objetivo que puede ser probado en juicio.

Carabineros de Chile ejerció legítimamente y de buena fe las atribuciones que les otorga la ley para actuar sin orden judicial.

Al descubrir que el vehículo controlado tiene encargo por robo, los agentes policiales estaban facultados para la detención del acusado, atendido su deber de supervigilar la Ley del Tránsito.