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Tras siete años de litigios en tribunales franceses, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos concluyó que una mujer de 69 años no incurrió en «falta» por dejar de mantener relaciones sexuales con su esposo.
Tras siete años de litigios en tribunales franceses, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos concluyó que una mujer de 69 años no incurrió en «falta» por dejar de mantener relaciones sexuales con su esposo.
En los casos de violencia sexual contra varones, se debe considerar que los agraviados tienen una particular vergüenza y pudor para denunciar los hechos y declarar sobre los mismos, pues aún en la actualidad la sociedad considera que tal agresión sexual es incompatible con el rol masculino. Los agraviados se sienten menos varones por lo sucedido, lo que repercute en su silencio y la consecuente invisibilidad de tales casos.
La tipicidad subjetiva no requiere una finalidad libidinosa, lo que exige es la descripción de la naturaleza sexual del acto que se realiza voluntariamente y, junto a ello, la concurrencia de la afectación del bien jurídico, la libertad y la indemnidad sexual.
El tipo penal del abuso sexual no requiere un elemento subjetivo especifico que, a veces, se ha expresado con la identificación de unos ánimos, lascivos o libidinosos, sino que como delito contra la libertad requiere en su tipicidad subjetiva el dolo, entendido, en su acepción clásica, como conocimiento y voluntad de agredir la libertad sexual o la indemnidad de una persona, sin necesidad de que se concrete en un ánimo libidinoso.
Consiste en una sobrevenida modificación unilateral y clandestina, inconsentida, de las condiciones en que se había prestado el consentimiento primigenio y constituye un ilícito penal.