La solicitud indica que G.O.F., patrullero de la Policía Nacional, habría sido amenazado de muerte tras negarse a devolver explosivos que le fueron confiados por dos subintendentes de la Unidad de Antinarcóticos, quienes presuntamente planeaban entregarlos al Ejército de Liberación Nacional (ELN).
28 de septiembre de 2024