No existe justificación alguna para deslindar su responsabilidad en el desarrollo de los hechos, en tanto la actora sabía cuál era la película que se iba a reproducir, y que no fue obtenida de la biblioteca del colegio, sino que provenía de un adulto, por lo cual debió oponerse a su reproducción, dado que no está recomendada para niños de 9 y 10 años.
9 de junio de 2024