Proteger la salud pública justifica someter al personal sanitario no vacunado a pruebas regulares para la detención del COVID-19.
El Tribunal Federal Suizo desechó las alegaciones formuladas por algunas personas que consideraban que estas pruebas constituían una desigualdad de trato frente al personal vacunado, además de vulnerar gravemente la libertad personal y la intimidad de las personas afectadas.