Ofertas de supermercado que publicitan rebajas deben calcularse sobre la base del precio más bajo de los últimos treinta días, resuelve el TJUE.
Una reducción del precio anunciada por un comerciante en forma, bien de un porcentaje, bien de una mención publicitaria dirigida a destacar el carácter ventajoso de una oferta de precio, se debe determinar sobre la base del precio más reducido aplicado por el comerciante durante un período que no puede ser inferior a los treinta días anteriores a la aplicación de la reducción del precio.